lunes, 22 de noviembre de 2010

enloqueciendo...


Un vaiben de preguntas, un mar de incertidumbre rodea la isla perdida. Relámpagos que interactúan entre la lluvia y las estrellas. Relojes que giran sin cesar a una velocidad incalculable, medible solo por aquellos momentos que nos dejan algo de vida, de muerte, de dolor, de alegría, en un claroscuro eterno que vibra dejando huellas acumuladas en una montaña de energía… enredados entre caminos contradictorios, diversos, ineludibles, espontaneos, cambiantes y permanentes. Que queda? Algo fluye sin dejar rastros? Que los fija? Lo incierto nos domina, lo cierto nos atrapa… sumergidos en una inmensidad inabarcable… hormigas q luchan para conseguir una hojita q las alimente, una brisa las destruye en un instante… sobrevivientes de una tormenta eterna, intensa, apasionante…
Ser ¿ permaneSER? Como permanecer siendo’? … transitos que no deriven en rutina,, realidades que invaden fantasias, fantasias que se reavivan en lugares insolitos, sin tiempos ni tierras firmes. Dudas que se diluyen en la vivencia… fantasmas que conviven entre el presente y el pasado , mostrando un futuro marcado, paredes q se derrumban, paraísos q aparecen y se tiñen de una infinidad de colores q apenas alcanzamos a distinguir…
Pasiones q alimentan la espiritualidad del alma.. sueños q nos despiertan en un mundo q pensamos q se había desvanecido… terrenos que nacen en el espacio, espacios q detienen aquella rueda q parece girar sin frenos… luces que se esconden en el manto negro que nos refugia.. nos aloja en aquella sensación de poder sentir sin pautas previas.. de elegir hasta eludiendo las elecciones… de vivir lo q evitamos y lo q buscamos.. lo que msotramos y lo q guardamos.. lo q nos impulsa y lo q nos retira haciéndonos retroceder.. de donde??? Que dirección es la correcta?? Inmersos en un relativismo donde las diagonales cortan aquel camino recto y lleno de todo y de nada… sorpresas que nos atraviesan elevándonos en una nube repleta de aire calido… como si fuera una gran frazada donde nos sentíamos tan pequeños en los principios hasta los q llegan nuestras memorias… siempre encontramos o reencontramos ese recóndito lugar en el q soliamos estar resguardados…